Sé que eres logopeda… pero ¿a qué te dedicas?

Y es mucho, mucho más que el sonido “R”…

En honor al Mes del Mejor Habla y Audición, estamos observando de cerca la multitud de formas en que los patólogos del habla y lenguaje pediátricos (también conocidos como terapeutas del habla) ayudan a los niños a comunicarse. El tema del Mes anual de Mejor Habla y Audición de este año es “Comunicación para todos”. Este tema describe perfectamente el papel que juegan los fonoaudiólogos en la vida de las personas. Los terapeutas del habla desempeñan una variedad de funciones para ayudar a los niños a mejorar sus habilidades de comunicación. Y es mucho más que simplemente ayudar a los niños a decir el infame sonido “R”…

  • Evaluación y terapia de la articulación:
    Probablemente el área más conocida del campo de la logopedia. La evaluación y la terapia de articulación implican identificar los errores de sonido del habla de un niño (p. ej., hablar con un ceceo o sustituir el sonido de una “w” por un sonido de “r”) y tratar esos errores a través de una variedad de métodos diferentes. Desde técnicas tradicionales de logopedia hasta intervenciones más especializadas como el Método PROMPT.

  • Evaluación y terapia del lenguaje:
    Mientras que muchos niños son identificados estrictamente sobre la base de errores de articulación, otros niños experimentan dificultades con su comprensión y producción del lenguaje hablado. Esto implica retrasos o déficits en vocabulario, sintaxis/gramática, lenguaje descriptivo, etc. Los niños con un trastorno del lenguaje pueden tener problemas para seguir instrucciones, expresarse oralmente o por escrito, o comprender un lenguaje no literal. Esta categoría también incluye a los “habladores tardíos” que pueden no estar produciendo palabras verdaderas o palabras suficientes para cumplir con los hitos del lenguaje temprano.

  • Lenguaje pragmático (también conocido como “Comunicación social”)
    Al evaluar el lenguaje pragmático, los terapeutas del habla observan la capacidad del niño para usar el lenguaje correctamente en varios escenarios sociales. Esto incluye: hacer un contacto visual apropiado, reconocer y usar el lenguaje corporal para las señales sociales, elegir temas de conversación apropiados y mantener o cambiar los temas de manera adecuada. Esto también incluye el uso funcional correcto del lenguaje (por ejemplo, decir lo que quieres decir). También incluye fortalecer las habilidades de tomar perspectiva y mejorar la capacidad de leer las señales sociales para interpretar y responder adecuadamente al comportamiento de los demás. Para los niños más pequeños, esto a veces puede implicar el uso de estrategias, como los principios DIR/Floortime, para aumentar el compromiso, la interacción y las habilidades de atención conjunta y construir estas bases para el lenguaje a través del juego y siguiendo el ejemplo del niño.

  • Evaluación y terapia del trastorno de la fluidez:
    Los trastornos de la fluidez, comúnmente conocidos como “tartamudeo”, incluyen repeticiones de sonidos o palabras, prolongaciones de palabras, bloqueos al tratar de producir una palabra o cualquier interjección o revisión en el habla de un niño que no se considere típica. La terapia de fluidez implica comprender cómo se produce el habla dentro del cuerpo y luego usar estrategias para facilitar un habla más fluida y con un sonido suave, lo que a veces incluye la disminución de la velocidad del habla.

 

  • Evaluación y terapia de lectura/escritura:
    Las investigaciones muestran que el lenguaje oral y el habla están fuertemente correlacionados con las habilidades de lectura. De hecho, entre el 50 y el 80 % de los niños con trastornos del habla eventualmente experimentarán retrasos en la lectura y la ortografía. Sin una intervención temprana, es probable que los estudiantes no tengan éxito durante sus años escolares. Los terapeutas del habla pueden evaluar los trastornos de la lectura (procesamiento fonológico, velocidad, precisión y comprensión) y la escritura (ortografía, uso de lenguaje descriptivo) y brindar una terapia que aborde estas habilidades desde una perspectiva multisensorial.

  • Evaluación y terapia del procesamiento auditivo:
    Los niños con trastornos del procesamiento auditivo experimentan deficiencias en su capacidad para distinguir y discriminar los sonidos del habla. En el entorno del salón de clases, es posible que vea a un niño que tiene dificultad para seguir instrucciones de varios pasos, tiene malas habilidades de lectura y ortografía, o parece no escuchar el material presentado. Después de una evaluación, el terapeuta del habla puede derivar al niño a un audiólogo para una serie completa de pruebas de procesamiento auditivo antes de comenzar la terapia del habla para enfocarse en el procesamiento auditivo.

 

  • Evaluación y terapia de la voz:
    Los niños con trastornos de la voz pueden tener una voz ronca, una voz hipernasal o una voz hiponasal . Los terapeutas del habla pueden enseñarle a un niño cómo usar su voz de una manera más productiva. Un terapeuta del habla también puede derivar a un niño a un otorrinolaringólogo para descartar cualquier crecimiento dañino que pueda afectar la calidad vocal.

 

¿Tiene alguna pregunta o inquietud acerca de las habilidades de comunicación de su hijo? Comuníquese con Emerge – A Child’s Place y hable con uno de nuestros terapeutas del habla para saber si la terapia del habla podría ayudar a su hijo.

 

 

Esta publicación de blog fue escrita por Erica O’Connor, MS, CCC-SLP.